La Montaña de Hua Shan está a 120 km de la famosa ciudad de Xi’an, en China, y es una de las 5 montañas sagradas del Taoísmo. Las otras son la Tai Shan, la Nan Heng Shan, la Bei Hen Shan y la Song Shan. Es necesario pagar para entrar en ella, unos 10€, y andar unas cuantas horas para llegar a la cima.
Estuve diez días en la ciudad de Xi’an ya que estaba extendiendo mi visado de China y eso tardaba una semana. Después de ver bastante la ciudad decidí escaparme a subir la montaña de Hua Shan (2154 m.). Después de unas 2-3 horas en autobús hasta la ciudad de Huayin (también se puede ir en tren desde Xi’an), llegué a la entrada del monte. Allí rápidamente conocí a un grupo de 3 amigos chinos que también iban a subirla y me junté con ellos. Uno de ellos ha venido a Bangkok recientemente :)
Eran alrededor de las 15h y mi idea era subirla y bajarla al mismo día pero ya vi que eso sería posible. Al principio, el camino es tranquilo, normal, pero al rato empieza a subir de forma exagerada. Te encuentras escaleras talladas en la propia piedra de la montaña con una inclinación brutal. Al menos tienes cadenas para agarrarte.
Al ser ya tarde y al hacerse de noche alrededor de las 18h ya vi que tendría que pasar la noche por allí y bajar a la mañana siguiente. Y, en realidad, eso era lo que tenían planeado mis nuevos compañeros y unos 300 o 400 chinos que calculo que habría en toda la montaña.
Muchos chinos suben de noche hasta casi la cima, esperan que esté a punto de salir el sol, terminan de subir y ven el amanecer desde arriba. Y eso hicimos. Aunque pasamos un frío de cojones por la noche, casi al pico de la montaña, esperando al amanecer. No íbamos preparados por el frío así que tuvimos que alquilar unas jaquetas estilo partido comunista que alquilaban por allí.
Al final estuvo genial, vimos el amanecer con otras 400 personas, la mayoría jóvenes y, cuando el sol ya empezaba a calentar de nuevo, bajamos. Tardamos unas 5 o 6 horas hasta llegar abajo. Como la montaña es tan famosa en la China, a la bajada encontramos a cientos y cientos de personas, de más edad, subiendo. ¡Incluso había policías distribuyendo el tráfico de personas!
Se sube por escaleras extremadamente empinadas y con escalones muy pequeños, con cadenas al lado donde agarrarte. A tramos, se pasa por caminos muy estrechos con acantilados bastante bestias como podéis ver en las imágenes (por el del medio no tuve que pasar). En el vídeo que adjunto al final del post podéis ver como sigue el camino de la imagen de debajo ;) Vale la pena! El camino que veréis en el vídeo era optativo y te obligaban a alquilar arnés de seguridad.
Y, finalmente, el amanecer del que pudimos disfrutar desde lo alto de Hua Shan :)